Menos de cien

La fórmula del éxito

Si la dietología del peso continúa dentro de la óptica primitiva e irracional de contar calorías como si se tratase de una clase magistral de matemáticas, la lucha contra el flagelo universal de la obesidad no tendrá visos de solución.

Hace noventa años, siguiendo los conocimientos antropológicos vigentes por aquellas épocas, y sumándole posteriormente, una extraña dosis de alquimia científica, donde biólogos marinos, químicos y otros especialistas “no médicos” formularon y sentaron sus inconsistentes verdades alimentarias, la ciencia dietológica se encaminó, obediente y sin cuestionamientos, detrás de esos poco sustentables principios.

Dietas del Mediterráneo, de la China, de la luna, del astronauta, e infinitas más quedaron como verdades de Perogrullo. Década tras década se siguió repitiendo la misma historia, alejándose cada vez más de… La verdadera historia del hombre como especie.

Las calorías pasaron a ser la vedette alimentaria y, calculadora en mano, cualquier mortal ya puede organizar su vida matemáticamente y evitar así todo atisbo de sobrepeso u obesidad. Las grasas, villanos eternos de la dieta, a la luz de la historia deben dejar su nefasto y culposo lugar…El ser humano es un cazador, y nunca un cazador se va a morir del producto de su caza.

Si la agricultura, con su creciente aporte de carbohidratos fue el primer error alimentario humano, el alegre agregado de semillas, cereales, frutos secos y demás nutrien-tes hidrocarbonados e hipercalóricos, se encargaron de hacer el resto para que hoy estemos contemplando a la obesidad como… La epidemia del siglo.

Pese a quien pese, y guste a quien guste, la única solución para enfrentar a la obesidad es… Reducir carbohidratos. Menos de cien gramos de ellos para adelgazar, y no más de doscientos para evitar subir de peso. La menor cantidad de ellos posible, sin contar calorías, sin agregar las semillas, sin incluir los frutos secos… Al cazador, su caza.

De este modo, la Guía Alimentaria “Menos de cien” es el aliado ideal para lograr el objetivo de controlar cuánto y de qué calidad es lo que comemos. Reducir carbohidratos es el único camino hacia el equilibrio ponderal y… No soy yo quien propongo el cambio, son 200.000 años de historia humana que exigen tener ¡Coherencia alimentaria!